El aula no se puede enseñorear de una característica que resulta opaca a sus posibilidades. El liderazgo, necesita de la acción, y eso el solo entendimiento jamás lo propiciará.
Artículo publicado el 13/1/2016 en Directivos y Gerentes.
El mundo, al igual que la música, no (solo) hay que entenderlo, (también) hay que sentirlo. Intelecto y emoción en un plano de igualdad. La emoción no es una derivada segunda del intelecto. ¡Situemos a la emoción en su sitio!
Son muchos los programas de dirección de empresa que fundamentan la validez de sus enseñanzas -y consecuente aprendizaje- a partir de conocimientos de naturaleza puramente intelectual. Conocimientos que, por otra parte, se muestran como insuficientes para el buen gobierno de cualquier institución.
Funciona con WordPress & Tema de Anders Norén